La demanda y la competitividad del mercado han ayudado a que aparezcan nuevos planes y distribuidores que manejan precios más bajos. Solamente debemos de observar bien y asegurarnos que las características y propiedades están a la altura:
-Están moldeados con polietileno virgen. Los plásticos reciclados ya no cuentan con la misma flexibilidad y durabilidad mecánica, por lo que se tendrá el riesgo de que en cualquier momento surjan grietas y cuarteaduras.
-Cuentan con certificaciones nacionales e internacionales, como el grado alimenticio otorgado por la FDA de los Estados Unidos. Entre las exigencias para conseguir la certificación:
a) ser moldeados de una sola pieza
b) ninguna de sus paredes es menor a los 4.5mm de grosor
c) serializados; puedes identificar su número para control de calidad.
-Suelen contar con capas adicionales para mejorar la protección del contenido, evitar formación de hongos y bacterias.
-Tienen paredes reforzadas, que les permiten soportar traslados y aumenta su tiempo de vida estimado. El mínimo estándar siendo de 1.20 kg/dm3 la densidad de lo que pueden contener.
-Ofrece protección contra los rayos ultravioleta y la luz solar, previniendo la formación de lama y agentes bacteriológicos. -Permite un sello hermético al momento de poner su tapa, para evitar la contaminación del contenido.
-Vienen con garantía de reparaciones o reposición. Algunas marcas ofrecen programas de por vida, otros a cinco años.
-Están hechos para funcionar tanto en interiores como exteriores.
Por fortuna, existen alternativas en el mercado con precios competitivos mientras que cubren con estas exigencias. Un poco de comparación de productos te ayudará a encontrar la línea de tinacos que tengan lo mejor de los dos mundos, calidad y buen precio.
